Más de trescientos años de historia
La religiosidad o el culto mariano esta ligado directamente con los actos de piratería y cautiverio. Según la tradición, el 1 de agosto del año 1218, el santo Pedro Nolasco387 -tras una aparición de la Virgen María- fundó una orden religiosa con el fin principal de redimir a aquellos cristianos cautivos en el Reino de Aragón. Su principal objeto fue “la redención de los gimientes y desafortunados cautivos cristianos en poder de los mahometanos y piratas sarracenos que infestaban el Mediterráneo”. Sobre todo los miles de presos que se encontraban en Argel, Orán, Bugía o Túnez.388 Esta labor propició la expansión de la Orden por todo el litoral costero, como ocurre en nuestro caso.
La iconografía usada para representar a la Virgen de las Mercedes queda definida a partir del siglo XVI, consistiendo fundamentalmente en el hábito mercedario: túnica, escapulario y capa, todo en color blanco, y escudo mercedario. Otros elementos son las cadenas y el grillete, símbolos también del cautiverio. Normalmente, además del escapulario del hábito, lleva otro pequeño en la mano que ofrece a los fieles. Suele aparecer tocada con corona de reina, y sostiene en la izquierda al Niño Jesús, que también lleva un escapulario en las manos.
En un documento oficial del arzobispado de Granada se dice textualmente que “la cofradía la componían en 1714 Francisco de Quero, como hermano mayor, y Pedro de Montes, como mayordomo. Tiene por limosneros y fabriqueros -quienes custodian las alhajas de las Virgen- a Juan Cano y a Bartolomé Bernabé”. Se le tomaron cuentas por parte del visitador eclesiástico el 14 de septiembre del año 1714 y entonces se dice que “tiene constituciones desde hace más de ocho años”.
En el mismo documento se recoge que la Hermandad de la Virgen de las Mercedes se fundó el 8 de enero del año 1694 ante el notario apostólico Gabriel de Flores.389 Antonio Gil Albarracín sitúa su origen equívocamente en el año 1714, ya que toma como fecha la “revisión de las reglas de la hermandad”, que hizo el arzobispo Pedro Antonio Barroeta y Ángel; y cree que fue este eclesiástico quien fundó la cofradía. Según el certificado redactado el 14 de mayo del año 1769 por Agustín de Peralta y Callejón y Félix Alonso y Casares, curas de la parroquia de Santa María de Ambrox de Dalías, por orden de Pedro Antonio Barroeta y Ángel, arzobispo de Granada, existía en la misma “la hermandad de Nuestra Señora de las Mercedes, con Constituciones aprobadas el año mil setecientos y catorce por Juan Gómez de Escobar, Provisor y Vicario General; con Constitución de dar anualmente cada armador de barcas de pescar la parte que le toca a un hombre trabajador de ella, con lo que costean los hermanos la cera y funciones de la iglesia que hace dicha hermandad y sufragios por los hermanos difuntos (sic)”.390
La cofradía contaba desde sus comienzos con más de cien hermanos, fue única en su estilo junto a la de Adra, que tenía la de Nuestra Señora del Mar, también compuesta por “gente de marina y pescadores”.391 Era una hermandad grupal compuesta por gente dedicada exclusivamente al mundo del mar, heredándose su puesto en la cofradía de padres a hijos. El propósito era proporcionar un «seguro de vida» a los pescadores en caso de que fueran apresados por la piratería del norte de África. Se financiaba a través de donativos y contribuciones de los propios pescadores, quienes dedicaban un jornal de cada embarcación -entorno a los 200 reales-.392 Es la patrona de Balerma y se celebra el mismo día que la Iglesia Católica Apostólica Romana celebra la Festividad de la Asunción de Nuestra Señora, el 15 de agosto.
Información recogida en el Libro Historia General de Balerma y Guardias Viejas
Bibliografía
387 “Pedro Nolasco halló en Berbería los padecimientos que tanto ansiaba, y vióse cargado de cadenas para librar al prójimo de las suyas, á ejemplo del que murió por darnos vida”. Pedro fundó la orden junto a Raimundo de Peñafort, quien escribió sus primitivas reglas. Contó con el patrocinio del rey Jaime I el Conquistador (1212-1276). Y fue aprobada por el Papa Honorio III (1216-1227) y confirmada en el año 1235 por Gregorio IX.
388 MARTÍ I CANTÓ, Joan, Flores del alma Consagradas a la Virgen santísima durante el mes de Mayo: según el mes lírico de María, 1858. Págs. 185-186.
389 Agradecemos estos datos al historiador Valeriano Sánchez Ramos, archivo extraido del Archivo de la Curia Eclesiástica de Granada.
390 Archivo de la Curia Eclesiástica de Granada, Leg. F-96, Pág. 10. GIL ALBARRACÍN, Antonio. Cofradías y hermandades en la Almería moderna: historia y documentos, 1997. Pág. 217.
391 LÓPEZ MUÑOZ, Miguel Luis. Cofradías y Hermandades en el suroeste Almeriense: Siglo XVIII, Universidad de Granada. 1996.
392 Actas de las I Jornadas de Religiosidad Popular, Almería. Págs. 217-241.
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